El desprendimiento de vítreo, más conocido como desprendimiento de retina, es un trastorno de la visión que, por lo tanto, puede afectar a tu capacidad para conducir de forma segura. Si lo has sufrido y eres conductor, seguro que te preguntas si puedes seguir conduciendo sin problemas o si, por el contrario, te enfrentas a posibles multas. En este artículo te aclaramos todas tus dudas legales y prácticas.
¿Puedo conducir con un desprendimiento? La normativa
En España no existe una legislación específica que aborde el desprendimiento de vítreo y la conducción. Sin embargo, la ley establece que conducir con cualquier trastorno que afecte la capacidad de una persona para hacerlo de manera segura puede resultar en sanciones. En concreto, para obtener o renovar un permiso de conducir en España se requiere una agudeza visual mínima de 0,5 en cada ojo. Con la ayuda de gafas o lentes de contacto si es necesario.
Así pues, si las autoridades te sorprenden conduciendo con desprendimiento de vítreo y tu agudeza visual no cumple con los requisitos de visión mínimos establecidos por la ley podrías enfrentarte a multas e incluso a la suspensión de tu permiso de conducción.
La situación se complica si te ves involucrado en un accidente de tráfico y se determina que tu visión afectada fue un factor contribuyente al siniestro. En este caso podrías enfrentarte a un delito de responsabilidad civil o incluso penal, dependiendo de la gravedad del accidente.
El impacto de un desprendimiento de retina en la visión
La retina es la parte del ojo que recibe la luz y la convierte en señales eléctricas que el cerebro interpreta como imágenes. Entre la retina y el cristalino se encuentra el humor vítreo. Cuando esta sustancia gelatinosa se separa de la retina, ya sea debido al envejecimiento, por un golpe o por alguna enfermedad ocular, entonces hablamos de que se ha producido un desprendimiento de vítreo.
Esta condición puede provocar una serie de síntomas que afectan la visión. Los más comunes son:
- Disminución general de la agudeza visual
- Aparición de pequeñas manchas oscuras o sombras en el campo visual que se mueven con el movimiento ocular
- Sensación de destellos luminosos en el campo visual, sobre todo en condiciones de poca luz
Recomendaciones para conductores con desprendimiento de retina
Como hemos visto, padecer de desprendimiento de vítreo no significa que tengas obligatoriamente que dejar de conducir. Sin embargo, es importante tomar precauciones adicionales al conducir. Te recomendamos que sigas estos consejos para asegurar una mayor seguridad vial:
- Consulta a un oftalmólogo tan pronto como aparezcan los primeros síntomas. Solo él puede darte el diagnóstico y tratamiento adecuados.
- Asegúrate de cumplir con los requisitos mínimos de visión establecidos por la ley. Si necesitas corrección óptica, úsala siempre al conducir.
- Adapta tu vehículo. Por ejemplo, puedes instalar un espejo retrovisor panorámico para mejorar la visibilidad alrededor de tu vehículo.
- Extrema la precaución, especialmente en situaciones de poca luz o en áreas con mucho tráfico. Reduce la velocidad, sé generoso con la distancia de seguridad y presta atención adicional a los peatones y ciclistas.
- Evita conducir de noche o en condiciones climáticas adversas, como niebla, nieve o lluvia intensa.
- Llegado el momento, utiliza opciones de transporte alternativas. Si tu visión se deteriora hasta el punto de que no puedes conducir de manera segura, considera utilizar el transporte público, ceder el volante a amigos o familiares, etc.